jueves, 2 de junio de 2011

Poema LXV

.


INADAPTADO

Levantó la mano
en mitad de la noche
para alcanzar la luna
y lo llamaron loco.
Levantó la mano
en medio de una plaza
para tocar el sol
y lo llamaron iluso.
Levantó la mano
en mitad de la tormenta
para atrapar al rayo
y lo llamaron inconsciente.
Levantó la voz
en mitad de un discurso
para gritar justicia
y lo llamaron terrorista.
Levantó la voz
en mitad de Misa Mayor
para solicitar ayuda
y lo llamaron sacrílego.
Levantó la voz
en mitad de un mitin
para pedir trabajo
y lo llamaron reaccionario.

Cuántas veces escondí la mano
por temor al poderoso,
a ser marcado como inútil
para esta vacía sociedad.
Cuántas veces callé
por miedo al dedo inquisidor,
a ser expulsado del orden
y convertirme en inadaptado.
.

2 comentarios:

MiLaGroS dijo...

Genial Riardo. Me gusta mucho. Peor es pasar del miedo a la indiferencia que me está pasando a mi. Abrazos.

Teyalmendras dijo...

Me gustaron tus palabras... una suerte tropezar con tu blog.
Saludos ;)