ÍCARO REDIVIVO Cuando nací, crecieron alas en mi espalda que fueron cercenadas. Más tarde, como Ícaro, unas de plástico obraron mi caída. Ya no hay dolor, solo una abandonada y demoledora belleza en inmortales cicatrices. Ansia de libertad. Se calma cuando vuelo. Poema incluido en el Cuaderno de poesía nº7 del grupo poético Poetas sin sofá de Castellón.
No hay comentarios:
Publicar un comentario