miércoles, 21 de enero de 2015

Dismissione de Fabio Orecchini


Fabio Orecchini (Roma, 1981) vive en Roma. Sus textos y obras visuales aparecen en periódicos, revistas, antologías y sitios literarios. Colabora con las revistas Argo, Metromorfosi, AbsoluteVille. Como director hizo [A] livePoetry, un proyecto de videoarte y verbovisiva documentación dedicado a los poetas contemporáneos. Ha sido un promotor del olvido movimiento cultural pisoteo, el curado también la edición impresa de la colección del mismo nombre [Catedral, Ancona]. En el año 2010 Enajenación publicado [Polymath, Roma], re-lanzado recientemente para los tipos de Luca Sossella, en su versión final, con cd (el álbum conceptual de la misma obra por el proyecto consta de pan) y algunas obras visuales (modelos bocas) del mismo autor.   

Música y poesía conectados por un vivo híbrido cordón umbilical, todo se mezcla, que el amor, se dice, grita e indignado a terminar en un embudo vivido y padecido en la carne. Los romanos Pan - en su proyecto multimedia CD + libro Dismissione en colaboración con el poeta Fabio Orecchini - fotografiar y poner en foco la cuestión del amianto social y humano como fuente de la muerte, las palabras de experiencia y parpadea existencialistas música en una poética única "off" de gran impacto, una evolución casi visual.

ACIDI E BASE

Tornare
la stessa ghiaia il viale adombrato
la conta dei passi fino all’uscio
di porte blindare

ma in quella sera era l’andare
-l’illusione del ritorno-
non potevi sentirmi ed io entrai
sussurrai
la vecchia carta da parati
le pàrole sperse, due manciate di sale
la meccanica del fluido vapore
l’acciaio

“la cena è quasi pronta”
sola allora ti voltasti senza occhi
ti guardavo
deidratare
porgermi gli occhi in un posacenere
implorarmi di essere tuo figlio.
 

                                   ***

ÁCIDO Y BASE

Regresar
los mismos guijarros ensombrecidos
la cuenta de los pasos hasta el umbral
de puertas bloquear

pero esa noche era la marcha
-la ilusión del regreso-
no me podías oír y entré
soplé
el viejo papel pintado
las palabras perdidas, dos puñados de sal
la mecánica del fluido vapor
el acero

"La cena está casi lista"
Sólo entonces te diste vuelta sin ojos
te observaba
deshidratar
alcanzarme los ojos en un cenicero
rogándome que sea tu hijo.

Traducción de Silvia  Favaretto