miércoles, 29 de mayo de 2019

Carmen carminis. Presentación de Sonia Serrabao

PRESENTACIÓN DE CARMEN CARMINIS 

DE RICARDO FERNÁNDEZ MOYANO 

 

 

Carmen carminis es una antología de poemas del autor dedicados a “Ellas” y es fundamental resaltar el pronombre puesto que los poemas van dedicados o están inspirados tanto en niñas como en mujeres adultas. 

 

El título es en sí un nombre femenino, aunque etimológicamente nos encontramos ante un par de homónimos que se refieren a “poema” o “canción”, en latín; y a “viña” o “jardín” en árabe, que a su vez deriva del hebreo. De ahí que aún hoy, en el Albaicín, encontremos casas moriscas caracterizadas por sus enormes patios y jardines interiores. 

 

El poemario presenta toques propios del Romanticismo:  

 

  • El intimismo (con detalles sutiles de erotismo);  
  • El anhelo de libertad;  
  • La Naturaleza asociada a:  

     

    los estados de ánimo, como en “Zarzal”: 

     

    Buscas en el zarzal de la memoria 

    las luciérnagas 

que solían acompañar tus noches 

 

las partes del día, como en “Amanecer”, “Crepúsculo”, “Nocturno”; o las estaciones, como en “tarde de abril” 

 

  • La pasión amorosa, por medio de la hipérbole como en “Carta de amor” o “Mundos”, donde dice: 

     

    Todos los mundos se encuentran en ti 

     
  • El fracaso vital, que encontramos en “Vida”, donde el miedo y la duda aparecen personificados. 

 

Sin embargo, a pesar de ser un conjunto de poemas esencialmente romántico, en Carmen Carminis también se manifiesta el Modernismo a través de: 

 

  • Elementos exóticos y exaltación de la belleza sensorial en contraste con la evasión del mundo material, en poemas como “Pasos en la niebla”, “Hechicera”, “Oasis” o “espejismo” 

 

  • Referencias mitológicas como el guiño al mito de Ícaro que aparece en “Amanecer” 

 

  • Numerosas personificaciones que embellecen el escenario del poema como en “Tiempo de olvido”, en el que leemos: 

 

Hace tiempo que el viento 

escuchó su latido 

 

o en el “teléfono enmudecido” que aparece en “Soliloquio” 

 

  • Imágenes maravillosas como: 

     

    La luciérnaga febril de la noche  

    dibujó un espectro de duda 

     

    (“Mar de ternura”) 

     

     

    Un presagio delgado de luna 

    le abrasa la frente 

    y los árboles saben de su luz y su pena  

     

    (“Hechicera”) 

     

     

    Fragmentos de ternura 

    huyen entre los dedos 

    y los recuerdos se convierten  

    en una cascada de huesos  

     

    (“Sueño de luna”) 

 

 

Todas estas imágenes y otras tantas figuras retóricas como las sinestesias o las metonimias enriquecen ese “yo poético” contemplativo que observa el objeto/sujeto del poema, esto es, el “tú poético”, ese “Ella” presente en cada poema. 

 

Por otro lado, el léxico muestra varios arabismos que fortalecen el exotismo y les dan musicalidad a poemas como el titulado “En el alfeizar” o con los siguientes versos de “Abrazos”: 

 

Con el aljibe de abrazos te retiene 

y adormece tu boca entre sus sombras 

 

Asimismo, la luna, siempre tan femenina, se convierte en un símbolo recurrente en el conjunto del poemario. La luna, tan amante de poetas, tan lorquiana, tan lunera, personificada o no, se extiende con su luz de la mano de todas ELLAS en Carmen Carminis. 




Sonia Serrabao


En Barcelona a 25 de mayo de 2019.



jueves, 23 de mayo de 2019

Brotes en palabras de Carlos d'Ors


Presentación del poemario BROTES 

Antología poética de Ricardo Fernández Moyano.

Habla el Poeta,
Habla su Poesía...,
y su Alma es Luz en el Pesar,
nos llevó de su mano a la Pena
y nos hizo extender la Agonía.

Buenas tardes. Hoy vamos a presentar la Antología poética "BROTES" de un gran poeta y buen amigo, Ricardo Fernández Moyano.


Comencemos por el título BROTES. Pese a que el título es muy bello y poético, es tal vez, en mi opinión, incompleto; debería llamarse BROTES DEL PENAR o BROTES DEL PESAR, o, mejor aún, BROTES DE LA PESADUMBRE, e incluso, si mucho me apuran, no completamente cierto, puesto que más que de brotes en este poemario se debería de hablar de "Raíces", ya que los sentimientos que expresan estos rotundos y profundos versos de los poemas breves que contiene el libro están completamente enraizados y arraigados en el alma y en el sentir del poeta.

Tenemos por otro lado, la muy bella y atractiva Cubierta del libro. Tanto la tipografía, tan naturalista y ecológica, acorde con el título del poemario, como la ilustración, tan alegre y naif, nos llevarían a esperar un poemario, de signo y cuño alegre y naturalista; para entendemos, un canto a la Naturaleza en su alegre germinar. Y, sin embargo, nos encontramos, pese a ser una antología con un poemario, en su unitario discurrir, decididamente pesimista y desencantado, en ocasiones, pleno de amargura y desesperanza, emergiendo incluso a veces en los poemas una dramática desolación.

Por ejemplo, en uno de mis preferidos, el titulado Supervivencia I (ya el título es significativo y, encima, numerado con el título I, como que hay más capítulos poéticos de "supervivencia") podemos leer:

"Sabe que ha de morir,/sus ojos se apagarán un día/y su silenciada voz ya no golpeará/ ansiosa el oído de la noche. / Su esfuerzo por aplacar angustias/ y desandar caminos/ no aliviará finales de agonía,/ y sólo hay una salida:/ vivir contra el látigo del tiempo."


Todo ello expresado, eso sí, de un modo bellamente sentencioso y trascendente. Cualquier poema que elijamos tiene estas características señaladas. Más ejemplos que prosiguen el pesimista discurrir poético de nuestro poeta:

En Vivir, podemos leer lo siguiente; "Nacer, morir, /ya nada importa./ Vas dejando una estela/ en el acre perfume de la tarde/ y tras tus ojos muere/la luz de tus carencias./ Sólo vivir/ es importante." O en este otro, Escribir para vivir, el poeta sentencia:

"Vivir es morir en el intento./ No tengo más remedio que escribir,/ dejar regueros de vida en la vida/ en esta estéril lucha contra el tiempo./ Mientras sólo fluya sangre negra,/aún quedará savia en las venas./ Escribir es vivir en agonía."

Fijaros que ya han aparecido varias veces la palabra agonía, y la muerte y el morir están constantemente presentes en el sentir del poeta.


Es verdad que en algún poema brota, como por milagro, al final del mismo, un hilillo imperceptible, mínimo, del encanto del perfume del vivir, como en este titulado precisamente "El perfume": "La vida desgasta tu piel/ en el abismo del desánimo,/ y es una encrucijada oscura./ Los días saben a muerte/ pero no te engañes:/ en el sufrimiento, como en la ternura,/ saborea el perfume de la vida."


Estos BROTES, son brotes de las semillas de una tierra fértil en poemas de agónico sentir. Brotes que nadie como nuestro poeta cultiva y las posee. A mí me ha encantado este poemario. Estarnos ante un verdadero Poeta y un Poeta verdadero. Enhorabuena una vez más a Huerga&Fierro por apostar por un buen poeta y por poesía de verdad.


Porque no hay mala condición para un poeta que llora y canta. Ni poca comida. Ni poca agua para que germinen estos BROTES: sólo necesitan de la Luz, de una Luz de poesía, de una Luz aunque sea Luz de agonía. Porque aunque "nunca volverán aquellos días en que una ingenua luz de neón envolvía nuestros sueños y éramos felices en la ignorancia", sabemos que esa Luz nunca se apaga del todo y, aunque sea "de vez en cuando, divisamos espectros en el prisma, destellos en la sed de la ternura. "


Carlos d'Ors 

 Madrid. El Dinosaurio todavía estaba Allí,
21 de mayo de 2019.

Presentación de Carmen carminis en Barcelona



Será el 25 de mayo a las 19 h. en la Llibrería Documenta, Pau Claris, 144, baixos Barcelona.

Presenta: Sonia Serrabao.

Contaremos con la presencia de la editora de Ediciones Dédalo Violant Muñoz Genovés.

Lectura de poemas: Azahara Raimundo, Luisa López Gómez, Isabel Abad y Anna Benítez del Canto.
Actuación musical de la cantautora y poeta cubana Mane Ferret. 

Gracias por tu asistencia.

sábado, 11 de mayo de 2019

Presentación en Madrid de Brotes. Antología breve (1985-2016)

Martes 21 de mayo a las 19,30 h. en El Dinosaurio todavía estaba allí. Calle Ave María, 8.


Presenta: Carlos D’Ors.


Lectura de poemas: José Cereijo, Jesús Malia, María Monjas y Marga Clark.


Actuación musical de Anabella López Biedma.